La semana pasada les platique de cómo el jugar nos ayuda a ser más productivos
Hoy les doy tips de cómo integrar los juegos al trabajo. Esta lista puede no aplicar para todos y tengo la ventaja de que los videojuegos son parte de mi trabajo, pero les comparto algunas ideas:
- Primero piensa cuál será el objetivo de jugar para ti. ¿Diversión, despertar tu creatividad, unir al equipo?
- Define cómo integrar el juego a tu entorno. ¿Será parte del día-a-día? ¿Durante la mañana, la tarde? ¿Jugar solo o con amigos o compañeros de trabajo? ¿Es un evento de integración?
- Elige un juego (o varios) por jugar. Siguiendo la decisión anterior, ¿qué juego logra lo que quieres? ¿Es de consola, en la PC, en tu móvil?
- Asegura que todos tengan los recursos necesarios. ¿Consola con controles suficientes? ¿Buen teclado, mouse y headsets para juegos de PCs? ¿Un espacio cómodo para jugar?
- ¡Juega! Esto no es un paso cualquiera. Aquí debes enfocarte en el juego. Si estás en tu partida, no te distraigas en nada más. Ya comprometiste ese tiempo a divertirte, ahora regálate esos momentos.
- Haz del juego un motor para ti y tu equipo. Mídelo para que no se interponga a tus metas pero úsalo para lo que ya has definido tú.
Recuerda que jugar hace el trabajo más divertido, ayuda a tomar riesgos y nos ayuda a trabajar en equipo.
No siempre podemos jugar y no a todos nos gustan los mismos tipos de juego.
Pero recuerda que una asistente virtual te puede ayudar para que tengas tiempo de jugar y ser más productivo.
Recuerdo que en mi trabajo anterior, mi escritorio era “diferente” por estar lleno de juguetes: figuras de acción y réplicas. Aunque las reacciones de mis colegas eran distintas, nadie perdía la oportunidad de verlos o disfrutarlos. Ése es el efecto del juego, nos distrae unos momentos, nos llena de ideas y energía que nos permiten tener mayor impacto. Sé que no es posible redecorar nuestras oficinas o pasar medio día jugando, pero “condimentar” nuestra vida profesional con ello… No sé, piénsalo.
Por: Hugo Bretón
